[De nuevo aparecemos en mis sueños... corremos por debajo de la lluvia, no es fría, no es caliente, no es tibia... Tocaba su cabello mojado, y no, no se sentía mojado, ni seco, ni húmedo... Lo único que se escuchaba eran las risas, y lo único que se podía sentir eran los besos, no secos, no pasionales, no románticos, no húmedos, y las risas no eran bonitas, no eran feas, sólo eran risas... Risas y besos.]
- Estoy triste... Le comentaba a la madre de Marc por teléfono.
- ¿Porqué bela?.
- Mi mejor amiga encontró un chico y no es nada bueno con ella, hacen cosas perversas, él no la ama, y yo, yo estoy creando un mundo fantasioso, una mentira que se vuelve mi realidad...
- Bela... No te preocupes, aquí estoy.
[Me colgó, no dijo nada más, escuché a Marc llegando de casa en el fondo así que me apresuré para salir de clase e ir a las habitaciones, sabía que ella le convencería de volver a ese bar de nuevo...]
- Peluca, identificación alemana, maquillaje, dinero, listo.
[Salí de casa y me llegó un texto al facebook móvil...]
Marc: Add me :*
- Solicitud aceptada, Marc ahora se puede comunicar contigo y viceversa, gracias por usar Facebook Móvil -
- ¡Hey!...
- Hola bela ;)
- ¿Todo bien?.
- Sì, ¿porqué tan seca? :x
- Así soy con gente que apenas conozco, ¿problema? e-e.
- No, pronto me conocerás mejor... x3
- ¿Y eso?...
- En 5 llego al bar, ¿nos encontramos?.
- Vaale, y yo que me iba a acercar allá.
- Genial, te veo, hermosa... ;*
[¿Y este que le picó?, pensé extrañada, tenía novia apenas hace una semana; y ahora...]
- ¿Y dónde se escondió el perro?...
- Detrás de tí...
- Oops, invoque a un metalero salvaje.
- Hahaha, ya, vale, ¿cómo sabes que soy metalero?, dijo algo disgustado pero aún simpático.
- Alexandra Simons... ¿La conoces?, estaba muy enamorada de ti últimamente.
- Sí, la conozco...
- ¿Son amigos?, genial.
- No... Ya no.
- Uhm, ¿y eso?...
- Hmpft, no quiero hablar de eso... Te invito una copa.
- Vale, vino rojo, por favor...
- Cómo quieras, hermosa...
[Pidió una botella de vino rojo y nos sentamos en unas mesas bastante escondidas al fondo del bar... De esas en las que se meten los más pervertidos a hacer cosas sucias, algo raro... No había ninguno de esos en ese sitio.]
- ¿Qué hacemos aquí?...
- Serás mi Reina...
- ¿Eh?...
- Escoge, rey o esclavo...
- Uhm, rey... Es más poderoso.
- Entonces, así será...
- ¿Para qué?...
- Uh... Sabes...
- ¿Qué?...
- Siento cómo si te conociese de toda la vida...
- Me alegro, causo ese efecto en la gente...
[Estaba algo asustada porque no me respondió, nos quedamos callados, mirándonos en un perpetuo silencio mientras él servía el vino...]
- Seguro eres un pervertido, ¿o no?, por cómo me trataste la primera vez que nos vimos aquí.
- No, te demostraré que puedo ser un caballero también...
- Claro... Cómo quieras, entonces...
- Tome, madame, su copa...
- Danke, messier...
[Bebimos unas cuántas copas de vino hasta acabarnos la botella, poco después de saciarnos, supongo...]
- Ya es algo tarde, debería llevarla a su casa, madame...
- No, tranquilo, yo sé ir sola por estas calles, además, mi casa queda algo lejos...
- La mía no...
- Uh...
[Algo tramaba el pillo... En fin, se acercó lentamente, me sostuvo la quijada y me besó suavemente, era bueno, no lo dudé...]
- Lo lamento, madame...
- ¿Porqué?, besas bastante bien...
- Porqué eso no es lo que hacen los caballeros...
- En las películas si...
- Estoy triste... Le comentaba a la madre de Marc por teléfono.
- ¿Porqué bela?.
- Mi mejor amiga encontró un chico y no es nada bueno con ella, hacen cosas perversas, él no la ama, y yo, yo estoy creando un mundo fantasioso, una mentira que se vuelve mi realidad...
- Bela... No te preocupes, aquí estoy.
[Me colgó, no dijo nada más, escuché a Marc llegando de casa en el fondo así que me apresuré para salir de clase e ir a las habitaciones, sabía que ella le convencería de volver a ese bar de nuevo...]
- Peluca, identificación alemana, maquillaje, dinero, listo.
[Salí de casa y me llegó un texto al facebook móvil...]
Marc: Add me :*
- Solicitud aceptada, Marc ahora se puede comunicar contigo y viceversa, gracias por usar Facebook Móvil -
- ¡Hey!...
- Hola bela ;)
- ¿Todo bien?.
- Sì, ¿porqué tan seca? :x
- Así soy con gente que apenas conozco, ¿problema? e-e.
- No, pronto me conocerás mejor... x3
- ¿Y eso?...
- En 5 llego al bar, ¿nos encontramos?.
- Vaale, y yo que me iba a acercar allá.
- Genial, te veo, hermosa... ;*
[¿Y este que le picó?, pensé extrañada, tenía novia apenas hace una semana; y ahora...]
- ¿Y dónde se escondió el perro?...
- Detrás de tí...
- Oops, invoque a un metalero salvaje.
- Hahaha, ya, vale, ¿cómo sabes que soy metalero?, dijo algo disgustado pero aún simpático.
- Alexandra Simons... ¿La conoces?, estaba muy enamorada de ti últimamente.
- Sí, la conozco...
- ¿Son amigos?, genial.
- No... Ya no.
- Uhm, ¿y eso?...
- Hmpft, no quiero hablar de eso... Te invito una copa.
- Vale, vino rojo, por favor...
- Cómo quieras, hermosa...
[Pidió una botella de vino rojo y nos sentamos en unas mesas bastante escondidas al fondo del bar... De esas en las que se meten los más pervertidos a hacer cosas sucias, algo raro... No había ninguno de esos en ese sitio.]
- ¿Qué hacemos aquí?...
- Serás mi Reina...
- ¿Eh?...
- Escoge, rey o esclavo...
- Uhm, rey... Es más poderoso.
- Entonces, así será...
- ¿Para qué?...
- Uh... Sabes...
- ¿Qué?...
- Siento cómo si te conociese de toda la vida...
- Me alegro, causo ese efecto en la gente...
[Estaba algo asustada porque no me respondió, nos quedamos callados, mirándonos en un perpetuo silencio mientras él servía el vino...]
- Seguro eres un pervertido, ¿o no?, por cómo me trataste la primera vez que nos vimos aquí.
- No, te demostraré que puedo ser un caballero también...
- Claro... Cómo quieras, entonces...
- Tome, madame, su copa...
- Danke, messier...
[Bebimos unas cuántas copas de vino hasta acabarnos la botella, poco después de saciarnos, supongo...]
- Ya es algo tarde, debería llevarla a su casa, madame...
- No, tranquilo, yo sé ir sola por estas calles, además, mi casa queda algo lejos...
- La mía no...
- Uh...
[Algo tramaba el pillo... En fin, se acercó lentamente, me sostuvo la quijada y me besó suavemente, era bueno, no lo dudé...]
- Lo lamento, madame...
- ¿Porqué?, besas bastante bien...
- Porqué eso no es lo que hacen los caballeros...
- En las películas si...
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