[Luego de ponernos juntos vi que se le acercó otra alumna y le besó en la boca... Se sonrojó.]
- Ich Liebe Dich...
- Ich Liebe Dich, meine boy, dijo, con cara pícara...
- ¿Qué ha sido eso?, pregunté con curiosidad. ¿Es otra Maid?...
- No. Mi novia, dijo algo preocupado.
- ¿Novia?... Ya atónita y con algunas lágrimas queriendo salir...
- Sí, NO-VI-A. ¿Problema?.
- Si, adiós... Mientras corrían mis lágrimas por mis mejillas, salí del aula a extranjería...
[No suelo ser así, suelo aguantarme, pero en frente de tanta gente... Lo lamento, pero... No.]
- Esto ha sido todo... TODO.
[Me quité mi peluca rubia y fui a casa algo apurada.]
- ¿Wieso, wieso, wieso, wieso, ¡WIEESO!?... Grité con todas mis fuerzas mientras lloraba...
[Llegó la madre de Marc y me abrazó, es bastante tierna...]
- ¿Que pasó?, bela... ¿Qué hizo ahora?, ¿es su novia?...
- Sí... Escapé de clase y vine... Secándome las lágrimas...
- Ugh, no deberías, ven, dame la identificación que te dí...
[Se la dí, limpié mis lágrimas y me aconsejó...]
- Deberías ir con tú amiga a las habitaciones de extranjería, desaparece para Marc por un tiempo, luego volverás, lo prometo... Averiguaremos cómo...
[Se fue y me arrodillé en aquel sofá en el que nos habíamos acostado la noche anterior, recordando todo y llorando... En eso, Marc llegó a casa.]
- Hmpft, ¿ahora qué?, con cara de amargado.
- Ayer estábamos bien, ayer me amabas...
- Yo nunca te amé...
[Me quedé callada y lloré más fuerte]
- Siempre te quise, cómo una mejor amiga, y creí que te podía contar todo, pero ahora...
- ¿Porqué esas noches me dijiste ''Ich Liebe Dich'', porqué?... ¿Porqué ahora a ella?, duele...
- Agh, a mí también me duele que estés llorando por esa estupidez...
- ¿Estupidez?, yo siempre te quise...
- ...Pues, lo lamento...
- La quemaré a ella y su casa... En realidad no era verdad, pero estaba molesta, y triste.
- Hmpfft, ten algo de respeto, ¡RESPÉTALA!.
- Ugh... Era broma, ¿sí?.
- ¡NO!, lo quieres, a pesar de que no lo harás, y lo sé... Estaba furioso.
- E-Está bien... Master.
- No me llames Master, ya no somos nada, muérete, ¿sí?.
- Cómo desees... Te daré ese placer.
[Se fue y fui a buscar algo en la cocina, desgraciadamente, no tuve valor y me regrese a la sala llorando... Comencé a ver mis manos, tenía uñas largas, así que empecé a hacerme pequeños tajos en la mano izquierda.]
- ¡ALEXANDRA!, Bela, ¿qué haces?. Miraba la madre de Marc desde el pasillo algo molesta.
- Tajos... Son pequeños, no saldrá sangre.
- No me importa, no lo hagas, ¡para ahora mismo!.
- Vale...
[Deje de hacerme tajos y me abrazó.]
- Danke, mamma... Comencé a llorar de nuevo.
- De nada, bela... Ya verás, él se va a arrepentir de lo que hizo.
.- No lo creo...
- Vamos, Nikola... Aún queda una oportunidad más... No te rindas, bela.
- Ich Liebe Dich...
- Ich Liebe Dich, meine boy, dijo, con cara pícara...
- ¿Qué ha sido eso?, pregunté con curiosidad. ¿Es otra Maid?...
- No. Mi novia, dijo algo preocupado.
- ¿Novia?... Ya atónita y con algunas lágrimas queriendo salir...
- Sí, NO-VI-A. ¿Problema?.
- Si, adiós... Mientras corrían mis lágrimas por mis mejillas, salí del aula a extranjería...
[No suelo ser así, suelo aguantarme, pero en frente de tanta gente... Lo lamento, pero... No.]
- Esto ha sido todo... TODO.
[Me quité mi peluca rubia y fui a casa algo apurada.]
- ¿Wieso, wieso, wieso, wieso, ¡WIEESO!?... Grité con todas mis fuerzas mientras lloraba...
[Llegó la madre de Marc y me abrazó, es bastante tierna...]
- ¿Que pasó?, bela... ¿Qué hizo ahora?, ¿es su novia?...
- Sí... Escapé de clase y vine... Secándome las lágrimas...
- Ugh, no deberías, ven, dame la identificación que te dí...
[Se la dí, limpié mis lágrimas y me aconsejó...]
- Deberías ir con tú amiga a las habitaciones de extranjería, desaparece para Marc por un tiempo, luego volverás, lo prometo... Averiguaremos cómo...
[Se fue y me arrodillé en aquel sofá en el que nos habíamos acostado la noche anterior, recordando todo y llorando... En eso, Marc llegó a casa.]
- Hmpft, ¿ahora qué?, con cara de amargado.
- Ayer estábamos bien, ayer me amabas...
- Yo nunca te amé...
[Me quedé callada y lloré más fuerte]
- Siempre te quise, cómo una mejor amiga, y creí que te podía contar todo, pero ahora...
- ¿Porqué esas noches me dijiste ''Ich Liebe Dich'', porqué?... ¿Porqué ahora a ella?, duele...
- Agh, a mí también me duele que estés llorando por esa estupidez...
- ¿Estupidez?, yo siempre te quise...
- ...Pues, lo lamento...
- La quemaré a ella y su casa... En realidad no era verdad, pero estaba molesta, y triste.
- Hmpfft, ten algo de respeto, ¡RESPÉTALA!.
- Ugh... Era broma, ¿sí?.
- ¡NO!, lo quieres, a pesar de que no lo harás, y lo sé... Estaba furioso.
- E-Está bien... Master.
- No me llames Master, ya no somos nada, muérete, ¿sí?.
- Cómo desees... Te daré ese placer.
[Se fue y fui a buscar algo en la cocina, desgraciadamente, no tuve valor y me regrese a la sala llorando... Comencé a ver mis manos, tenía uñas largas, así que empecé a hacerme pequeños tajos en la mano izquierda.]
- ¡ALEXANDRA!, Bela, ¿qué haces?. Miraba la madre de Marc desde el pasillo algo molesta.
- Tajos... Son pequeños, no saldrá sangre.
- No me importa, no lo hagas, ¡para ahora mismo!.
- Vale...
[Deje de hacerme tajos y me abrazó.]
- Danke, mamma... Comencé a llorar de nuevo.
- De nada, bela... Ya verás, él se va a arrepentir de lo que hizo.
.- No lo creo...
- Vamos, Nikola... Aún queda una oportunidad más... No te rindas, bela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario